anhelos

Anhelo, 
Alzar el vuelo, 
Libertad, mi Lucero, 
Pero, volar... 
Requiere impulso, 
Y me hundo, 
En lo correcto... 
Ser perfecto, 
Imposible, 
Lo detesto, 
Volé haciendo surcos, 
Me tacharon de grotesco, 
Volé lejos, muy lejos, 
Y vi un mundo de hormigas, 
Y alzado en los cielos,
Aún pensé que no podía, 
Aún oía esas voces, 
Que decían:
"Vuela recto, todo lo que haces incorrecto", 
Hasta que me alcé más y casi llego al universo, 
Ya no eran hormigas, pero aún así, 
Vociferaban y yo oía,
A unas motas de polvo, mecidas por la brisa, 
Diciendo que por alto que volase, 
No lo haría correcto, 
Así que me dije, desde cuando algo pequeño,
Insignificante, grosero, 
¿Puede parar el vuelo, 
Del que tiene alas y ganas de hacerlo? 
Así que seguí, 
No me hundí... Y os confieso,
A veces aún lo agradezco, 
Ya que para volar, no hace falta impulso, siquiera viento, ni conocimiento, para volar hay que creer, y no te miento, si recuerdo más los reproches , que los halagos, porque puestos a elegir, a ambos se los lleva el viento, pero al menos el reproche al irse, te resulta más ligero. 

Comentarios