Lámpara mágica

Froté demasiado la lámpara,
No apareció genio alguno,
Siquiera la magia me ampara,
Yo que peco de crédulo,

Preferiste otra alfombra,
Oh tú reina de Arabia,
La mía también era voladora,
Pero tú no cabias,

Te volviste tan fría,
Mujer desértica y árida,
Que me callé lo que sentía,
¿Por qué no me creías?
Yo pude haber sido el genio,
De tus mil y una noches,
Quitar de en medio,
Al otro patán,

Preferiste creer en derroches,
De amor eterno y buen champán,
Yo sigo surcando el cielo,
Mientras de tu corazón espero el deshielo,

Poderme de nuevo acercar,
A esos te quieros,
Que rozamos...
Entre tanto conversar.

Comentarios