Desde ahí arriba

Desde ahí arriba,
Vigila,
La vigilo,
Mente perdida,
Roída por lo vivido,
¿Me quiere?
Acaso puede,
Corazón del norte,
Herido,
No hay Cupido,
que lo arregle...

Aún así,
Si ella quiere,
No hay imposibles,
Que no se ponga sensible,
recordando su origen,
ahora está en una isla,
Y es naufraga de amor,
Y yo soy marinero,
que llegaría al albor,
Del mundo,
Por un beso suyo,
o por un te quiero...

Ojalá arribe a tierra...
A su península natal,
pasando por Barcelona,
Y que este poeta,
pueda lograr...
pueda ver,
como se enamora,
de él,
cada día un poco más.

Desde ahí arriba

Comentarios