El escote de la bruixa d'Horta

Bruja bruja de horta,

Después de tantas tortas,

Dejaste mi mente absorta,

Con esa camisa de franela...

Y ese escote,

¡Vida mía qué escote!,

Conmigo no te lo ponías,

No pude observar bien tus dotes,

Y bien que hiciste...

Hubiese perdido el norte,

Viendo ese escote,

Sabiendo que no me quisiste,

Madre mía,

Bruja de horta,

Yo no suponía,

Que gracias a la brujería,

Tal prodigio tendrías,

Debajo del mentón,

Perdón,

Por echarles un largo vistazo,

Se me viene el mundo abajo,

Son mi perdición,

Desde horta hasta Grecia,

Desde Grecia al más allá,

Esos senos prominentes,

No se borran de mi mente,

No me dejan progresar,

Mi oscura mente me falla,

Ya no sé a donde mirar,

Me siento como un niño,

Mirando tu canalillo,

Este frío amor carnal,

Este culto al vicio,

Me precipita hacia el abismo...

Mi vida es un estropicio,

Así que déjame observar,

Hasta que tenga estigmatismo...

Ese pecho sin igual,

Bruja de Horta,

Déjame mirar desde tu bola,

De cristal,

El mejor de tus encantos,

El culmen de tu mal...

La razón por la que me levanto.